La IV Cumbre Fe y Libertad (Faith and Freedom Summit), celebrada los días 24 y 25 de septiembre en el Parlamento Latinoamericano de Ciudad de Panamá, reunió a una diversa coalición de voces que abogan por la libertad religiosa y la coexistencia pacífica. Con más de 40 ponentes internacionales que representaban una amplia gama de creencias -incluidos cristianos, musulmanes, budistas, cienciólogos, indígenas mayas, sijs, hindúes y no creyentes-, la cumbre sirvió de plataforma vital para el diálogo y la colaboración. Entre los oradores principales se encontraba la Dra. Nazila Ghanea, Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre la libertad de religión o de creencias.
En un significativo discurso pronunciado digitalmente en la Cumbre Fe y Libertad celebrada en el Parlamento Latinoamericano de Panamá, la Dra. Nazila Ghanea, destacó el papel fundamental de garantizar que nadie sufra discriminación o violaciones de los derechos humanos debido a su religión o sus creencias. A pesar de no haber podido asistir en persona, el discurso de la Dra. Ghanea abordó varios temas pertinentes que son fundamentales en los esfuerzos mundiales por salvaguardar esta libertad fundamental.
Garantizar la libertad de religión o creencia para todos
La Dra. Ghanea comenzó su intervención haciendo hincapié en la responsabilidad colectiva que cada uno de nosotros comparte en la defensa de la libertad de religión o creencia. Nos hemos reunido… en reconocimiento de las responsabilidades que asumimos para garantizar que nadie sea discriminado por motivos de religión o creencias, y que todos y cada uno de nosotros podamos disfrutar de la libertad de religión o creencias». La cumbre reunió a participantes de todo el mundo, tanto en persona como digitalmente, para reafirmar la importancia de promover estos derechos para todos.
Diplomacia y libertad de religión o de creencias
Uno de los temas clave que destacó la Dra. Ghanea fue la intersección de la diplomacia y la protección de las libertades religiosas. Se refirió al informe AHRC 5238, presentado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en marzo de 2023, que se centraba en el panorama mundial de la libertad de religión o creencia. El informe llama la atención sobre el creciente número de actores implicados en esta diplomacia y les insta a defender la universalidad e indivisibilidad de los derechos humanos. A pesar del creciente compromiso, el Dr. Ghanea advirtió que «el reto que tenemos ante nosotros sigue siendo grande», e instó a mantener los esfuerzos en este ámbito.
Cooperación regional e internacional
La Dra. Ghanea subrayó la importancia de la colaboración entre los sistemas regionales e internacionales para proteger las libertades religiosas. Destacó el compromiso productivo entre su mandato y organismos regionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana. «Es fundamental que estemos informados, que seamos abiertos y que dejemos la opción de la colaboración», subrayó. Esta cooperación es esencial para compartir buenas prácticas, prestar apoyo e incluso emprender acciones conjuntas cuando sea posible.
Participación de las bases y la sociedad civil
Otro tema crucial en el discurso de la Dra. Ghanea fue el papel de los sistemas nacionales, la sociedad civil y los movimientos de base en la promoción de la libertad de religión o de creencias. Hizo referencia a su informe de octubre de 2023 (A78207) para la Asamblea General de la ONU, en el que se examinaba este derecho desde una perspectiva de base. «Si no lo consideramos desde el punto de vista del beneficiario, es decir, de todos, entonces ¿qué sentido tiene la libertad de religión o de creencias?», preguntó retóricamente. La Dra. Ghanea subrayó que los actores estatales tienen una obligación legal, mientras que los no estatales tienen la responsabilidad de garantizar que este derecho se cumpla plenamente.
En el ámbito nacional, subrayó que la obligación del Estado se extiende a diversas autoridades, desde el nivel federal al municipal, y que estos actores deben ser conscientes, estar formados y rendir cuentas. Los agentes no estatales, en particular la sociedad civil, desempeñan un papel vital en el fortalecimiento de las políticas nacionales y en la exigencia de responsabilidades a los gobiernos respecto a sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.
El papel de los medios de comunicación en la promoción de la libertad religiosa
La Dra. Ghanea también se refirió al impacto de los medios de comunicación en la promoción u obstaculización de la libertad de religión o creencia. Se refirió al informe AHRC 5547, presentado en marzo de 2024, en el que se analizaba el papel de los medios de comunicación y la sociedad civil en la lucha contra la apología del odio basado en la religión o las creencias. Hizo hincapié en que las respuestas de los medios de comunicación, junto con las acciones del Estado y la sociedad civil, pueden ser transformadoras a la hora de promover la tolerancia y el entendimiento religiosos.
Religiones y creencias como instrumentos de paz
Hacia la conclusión de su discurso, la Dra. Ghanea se refirió a su próximo informe (A79182) sobre la paz y la libertad de religión o creencia, que se presentará en octubre de 2024. El informe explora cómo la libertad religiosa puede fomentar la consolidación de la paz y la prevención de conflictos. «La libertad de religión o creencia crea las condiciones, motivaciones, razones y movimientos para que surja la paz», afirmó, destacando el potencial de este derecho fundamental no sólo para garantizar las libertades personales, sino también para servir de piedra angular de la paz y la estabilidad mundiales.
Conclusiones: Un llamamiento a la colaboración y la vigilancia continuas
El discurso del Dr. Ghanea terminó con una nota de optimismo y un llamamiento a la vigilancia y colaboración continuas para garantizar la libertad de religión o creencia. Tras felicitar a los organizadores de la cumbre por haber elaborado un programa tan relevante e impactante, reafirmó la importancia crítica de llamar la atención sobre las responsabilidades de los actores estatales y no estatales a la hora de garantizar este derecho. También expresó su esperanza de que la cumbre sirviera para estrechar la colaboración entre líderes políticos, figuras religiosas, defensores de los derechos humanos, académicos y otros para lograr una mayor eficacia en la salvaguarda de la libertad de religión o creencia para todos.
La Dra. Ghanea expresó sus mejores deseos para el éxito de la cumbre y se mostró impaciente por conocer sus conclusiones. Su mensaje subrayó el compromiso compartido de defender una de las libertades más fundamentales de la humanidad, garantizando que todas las personas, independientemente de su fe o sus creencias, puedan vivir sin miedo a la discriminación o la opresión.
«Así que, para resumir, felicito a los organizadores por esbozar un programa de trabajo tan pertinente para la cumbre y me uno a todos ustedes para dar prioridad y reconocer las obligaciones críticas de las autoridades estatales a la hora de garantizar este derecho para todos y llamar la atención sobre las importantes responsabilidades del resto de nosotros hacia el mismo objetivo», concluyó Ghanea.
La IV Cumbre Fe y Libertad fue organizada por una coalición de ONGs dedicadas a la promoción de la libertad religiosa y la coexistencia pacífica, y contó con la presencia de numerosas personalidades como el Representante de la OEA en Panamá S.E. Sr. Rubén Farje, la Reverenda Giselle Lima (Co-Coordinadora de la Mesa Redonda de Panamá sobre Libertad Religiosa en Panamá, Mr. Iván Arjona-Pelado (recientemente nombrado Presidente del Comité de ONG sobre FoRB para las Naciones Unidas en Ginebra y que presentó la web www.whatisfreedomofreligion.org de la Iglesia de Scientology), la Sra. Maureen Ferguson que es una de las Comisionadas del USCIRF, Jan Figel (ex Enviado Especial de la UE sobre FoRB) y fue inaugurado y clausurado por el Ministro Encargado del Interior y el Ministro Encargado de Relaciones Exteriores del Gobierno de Panamá, además de embajadores de diferentes países.
