El patriarca Teodoro de Alejandría usó palabras duras y no hizo ninguna concesión al patriarca serbio Porfiry sobre su sensibilidad selectiva a lo que estaba sucediendo en el mundo ortodoxo: la intervención rusa en África pasó desapercibida, a diferencia de la invasión rusa de Ucrania. El 22 de julio, el patriarca serbio Porfiry envió una carta al patriarca Teodoro de Alejandría, pidiéndole que tome medidas para liberar al ex abad del monasterio de Kyiv-Pechersk Lavra, el metropolita Pavel Vyshgorodsky, informa “The Orthodox Times”. El patriarca serbio considera la decisión de la justicia ucraniana, por un lado, “fruto del ambiente tenso en Ucrania, envuelto en las llamas de la guerra”, y por otro, “resultado de la intención del actual autoridades para ocupar el Kiev-Pechersk Lavra (monasterio)”.
En la carta de respuesta publicada hoy, el Patriarca de Alejandría, tras subrayar que el Patriarcado apoya sin reservas la protección de los derechos humanos, se apresura a “recordarle” al Patriarca serbio que de ninguna manera ha mostrado la misma sensibilidad hacia los miles de cristianos ortodoxos. en África que son “envenenados espiritualmente por el Patriarcado de Moscú con la invasión depredadora y descarada de una parroquia que está geográfica, pastoral y espiritualmente bajo la jurisdicción del Patriarcado de Alejandría”.
El patriarca Theodore también destaca que en su carta, el patriarca serbio menciona a Ucrania “que está envuelta en llamas” sin nombrar al culpable de esta guerra agresiva contra el pueblo ortodoxo. “Nuestros hermanos ortodoxos rusos están desgarrando a sabiendas la prenda sin costuras de Jesucristo al verter veneno en la Iglesia de la Segunda Sede de Alejandría, lo que ha beneficiado a la Iglesia rusa al fortalecer su estatus autocéfalo”, declaró el Patriarca de Alejandría. “Observamos con pesar que en vista de este acto completamente injusto, anti-Iglesia y anti-canónico, usted no muestra la misma sensibilidad que en el caso del Metropolita Pavel Vyshgorodsky del Patriarcado de Moscú. Permanecéis en silencio a pesar de mis repetidos llamamientos, que afectan no solo a una persona, sino a miles de ortodoxos africanos”, añade el patriarca Teodoro. Afirmó que espera del patriarca serbio la misma sensibilidad que mostró al metropolita Pavel, y por lo tanto condenar las acciones anticanónicas y anticristianas de la Iglesia rusa.
Publicado originalmente en The European Times