El mundo ha sido testigo de avances extraordinarios en materia de salud desde que se estableció la agencia de la ONU, incluida la erradicación de la viruela, la casi eliminación de la poliomielitis y la disminución de la mortalidad materna. También se han salvado millones de vidas jóvenes gracias a la inmunización infantil.
“La historia de la OMS demuestra lo que es posible cuando las naciones se unen por un propósito común”, dijo el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus en un comunicado el lunes.
Grandes lagunas, amenaza climática
Aunque hay mucho de qué enorgullecerse, Tedros señaló el trabajo que queda por hacer para lograr la visión fundacional de la OMS de un mundo en el que todas las personas alcancen el más alto nivel de salud.
“Seguimos enfrentando grandes desigualdades en el acceso a los servicios de saludbrechas importantes en las defensas del mundo contra emergencias de salud y amenazas de productos nocivos para la salud y la crisis climática”, dijo.
Para hacer frente a estos desafíos, la OMS insta a los gobiernos a ttomar medidas urgentes para proteger, apoyar y ampliar el personal sanitario.
Escasez proyectada de trabajadores de la salud
Se debe priorizar la inversión en educación, habilidades y trabajos decentes para satisfacer la creciente demanda de cuidados y evitar una escasez proyectada de 10 millones de trabajadores de la salud para 2030principalmente en los países en desarrollo.
La OMS anunció recientemente un programa mundial de educación sobre atención básica de emergencia dirigido al 25 % de enfermeras y parteras de 25 países de ingresos bajos y medianos para fines de 2025.
Una nueva apreciación
El lunes, Tedros también pronunció un discurso de apertura en el 5º Foro Global sobre Recursos Humanos para la Salud en Ginebra. Más de 3000 delegados de más de 140 países asisten al evento de tres días, que coincide con la Semana Mundial del Trabajador de la Salud y el 75 aniversario de la OMS.
Hizo hincapié nuevamente en que la visión de lograr el nivel más alto posible de salud para todos solo puede lograrse con una fuerza laboral de salud adecuada y bien respaldada.
Tedros dijo que COVID-19 le ha dado al mundo una nueva apreciación del increíble valor de los trabajadores de la salud, quienes “trabajaron día tras día para protegernos”. Ellos y los sistemas de salud en los que trabajan están muy sobrecargados.
Millones de trabajadores de la salud y de la atención se infectaron durante la pandemia, dijo. Miles murieron, y muchos son simplemente agotado por el exceso de trabajo.
Ansiedad, depresión y agotamiento
Además, las graves interrupciones de los sistemas de salud durante la crisis mundial han provocado un exceso de mortalidad y muertes evitables en muchos países, revirtiendo los avances previos en materia de salud.
“La principal causa individual de la interrupción de los servicios de salud durante la pandemia fue la escasez de trabajadores de la salud. Y la barrera más grande para entregar vacunas y otras herramientas para salvar vidas para combatir el COVID-19 fue la escasez de trabajadores de la salud”, dijo.
Tedros informó que desde el inicio de la pandemia, más de uno de cada tres trabajadores sanitarios y asistenciales han sufrido de ansiedad y depresión, y alrededor de la mitad han experimentado el agotamiento.
“Los trabajadores están dando voz a su lucha”, continuó. “Las huelgas y acciones industriales están en niveles récord: se informa de insatisfacción con las condiciones laborales en más de 160 países”.
Honrar el legado
Tedros subrayó la necesidad de proteger a los trabajadores de la salud, incluso mediante la defensa de sus derechos laborales. También animó a los países a invertir en condiciones de trabajo dignas para el sector, salarios justos, capacitación y liderazgo.
El papel de las mujeres debe abordarse, agregó, ya que representan dos tercios de la fuerza laboral de salud y atención.
“Muy pocas mujeres ocupan altos cargos en el sector de la salud y existe una brecha salarial de género del 24 por ciento. el techo de cristal debe ser aplastado,» él dijo.
El jefe de la OMS pidió que todos los países trabajen juntos, ya que el trabajo no debe recaer solo en los Ministerios de Salud.
“Todos tenemos un papel que desempeñar”, dijo Tedros. “No hay mejor manera de honrar el legado de los trabajadores de la salud y de la atención que han perdido la vida a causa de la COVID-19, o que han enfrentado desafíos sin precedentes, que proteger, invertir, juntos.”
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