MANAMA, Bahrein — El discurso sobre la coexistencia en Bahrein ha recibido una atención renovada en las últimas semanas luego de una serie de reuniones nacionales tituladas “El Foro de Bahrein para el Diálogo: Este y Oeste para la Coexistencia Humana”, que ha sido promovida por el Rey Hamad bin Isa Al Khalifa. .
Algunas de estas reuniones han contado con la participación del Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar. Estos foros también han reunido a otros líderes religiosos, funcionarios gubernamentales, representantes de la sociedad civil, miembros de la Oficina de Asuntos Exteriores Bahá’í de Bahrein, así como a Bani Dugal, representante de la Comunidad Internacional Bahá’í, para explorar cuestiones relacionadas con la armonía social. .
La contribución de la comunidad bahá’í a estos debates, que ha recibido cobertura de una amplia gama de medios de comunicación nacionales, se centró en el importante papel que puede desempeñar la religión en el progreso social.
En un programa de radio transmitido a nivel nacional, Jalal Khalil, miembro de la Oficina de Asuntos Exteriores, habló sobre una reunión devocional que los bahá’ís de Bahrein han realizado mensualmente, reuniendo a actores sociales a nivel nacional.
“Estas reuniones promueven la unidad inherente de la humanidad y permiten a los participantes apreciar que el bienestar de las personas está vinculado al bienestar de su sociedad”, dijo el Sr. Khalil.
Explicó que los bahá’ís de Bahrein ven un enorme valor en los foros que permiten a personas de diferentes orígenes construir una visión común para un mundo material y espiritualmente próspero. “El diálogo interreligioso sobre la tolerancia y el servicio a la humanidad es de suma importancia”, dijo. “Permite a las personas llegar a un entendimiento común de que la religión, en su esencia, puede ser un medio para el amor y la unidad entre todos los pueblos”.
La relación entre la oración y el servicio fue explorada más a fondo por funcionarios y representantes de comunidades religiosas en un evento organizado por la Oficina de Asuntos Exteriores, que contó con comentarios de la Sra. Dugal.
“La adoración y el servicio a la humanidad están inextricablemente vinculados”, dijo.
“En última instancia, la oración debe vivirse en vidas con un propósito”, continuó la Sra. Dugal, “Este es un principio que está incorporado en los lugares de culto que se están levantando en las comunidades bahá’ís nacionales y locales de todo el mundo. Dichos lugares… están abiertos a todas las personas sin excepción… y son una prueba de que las comunidades religiosamente diversas pueden promover la causa de la paz”.
Durante una entrevista en un programa de televisión nacional ampliamente visto, el Sr. Khalil enfatizó el principio de unidad en la diversidad al recurrir a la metáfora del cuerpo humano para resaltar la interdependencia de la humanidad.
“Cada órgano y célula del cuerpo humano”, dijo, “tiene su función y composición específicas. Lo que hace que el cuerpo humano sea perfecto es la unidad y cooperación que existe entre estos órganos y células. De la misma manera… la humanidad puede trabajar junta. Y esta diversidad debe ser fuente de belleza y riqueza”.
El Sr. Kahlil agregó que aunque la coexistencia representa un objetivo elevado, esta metáfora apunta a algo más grande. El concepto de unidad tal como se describe en las enseñanzas bahá’ís, dijo, llama a las personas no solo a trascender las diferencias sino también a operar en un nivel en el que actúan para el mejoramiento de todos.
Este tema es la inspiración para un nuevo video producido por los bahá’ís de Bahrein que presenta a jóvenes de diferentes orígenes cantando sobre la inclusión, la unidad y el servicio a los demás seres humanos. El video, que fue transmitido en programas de televisión nacional, coincidió con las celebraciones del Día Nacional de ese país y es parte de las contribuciones de la Oficina de Relaciones Exteriores al discurso sobre la armonía social.
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